Redacción Sentido Común
Se llamaba Big Mama y era una gallina muy querida por su familia en Texas, Estados Unidos, a tal grado que cuando murió, la misma familia no quiso dejar pasar inadvertido el deceso.
Por ello recurrieron a la publicación de un obituario en el periódico local The Eagle.
“Es con tristeza que informamos el fallecimiento de nuestra gallina favorita de todos los tiempos, Big Mama. No muchas gallinas merecen un obituario, pero ella sí», dice el texto.
