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DIPUTADA VS VIDEOJUEGOS: ¡VAYA POLÉMICA!

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Luis Rubén Maldonado Alvídrez

Los lunes organizo mesas de análisis y discusión de asuntos de coyuntura en mi programa de radio “Plan de Vuelo” que se transmite por Antena 102.5FM a las 9 de la noche.

El pasado lunes, derivado de que se hiciera público en el portal digital La Opción de Chihuahua que la diputada del PRI, la parralense Ana Elizabeth Chávez, presentaría una iniciativa para limitar el acceso a juguetes y video juegos que induzcan a la violencia, lo que se interpreta por un gran sector de la población como una prohibición

El texto de la iniciativa dice como parte de su exposición de motivos: “Por lo que es importante señalar que existen estudios que advierten que el uso de videojuegos con contenidos violento, provocan en los menores que los utilizan por tiempo prolongado reacciones de discusiones con figuras de autoridad en su entorno escolar o familiar, así́ como a volverlos más propensos a peleas tanto físicas como verbales con sus compañeros de escuela, o aun una situación más lamentable como ha sido eventos recientes donde menores de edad han utilizado armas de fuego, y han protagonizado masacres inconcebibles en su entorno.”

Y remata: “Es por lo que se considera conveniente legislar de forma particular en este tema para crear conciencia tanto en los padres de familia como en las autoridades de la importancia de la prevención y reducción del uso de juguetes y videojuegos de contenido violento, con la finalidad de lograr que todos los niños crezcan en un ambiente de paz y armonía”.

Previo a eso hace a referencia a “cuantiosos” tratados internacionales y a Convención sobre los Derechos del Nino para llegar al meollo del asunto: Adicionar una fracción XII al artículo 108, y se adiciona una fracción XXVI al artículo 123, ambos de la Ley de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes del Estado de Chihuahua. Para que su redacción quede de la siguiente manera, “Evitar el uso de juguetes y video juegos que induzcan a la violencia” y otra que propone quede así: Realizar campañas permanentes de concientización, con el fin de prevenir el uso de juguetes y video juegos que induzcan a la violencia”.

Lo que desató la polémica, horas antes de la sesión del congreso del lunes pasado, incendiando las redes sociales.

Por lo que decidí invitar a gamers expertos a la mesa de los lunes para escuchar la opinión de los conocedores del tema y de una industria multimillonaria.

En cabina estuvieron Sergio Huerta, Iván Cantú, Daniel Moreno, Mario Fernández y Adrián Rodríguez del proyecto multiplataforma Xpert Gamers, dedicado al análisis de videojuegos, películas, series y tecnología.

Los chicos pertenecen orgullosamente a la comunidad gamer y en Xpert Gamers pretenden divulgar en a través de Youtube, Facebook e Instagram temas como lo son las nuevas tecnologías, cine, series, consolas y recomendaciones de juegos, así como ser una guía para todas aquellas personas que van iniciándose en el mundo de los videojuegos y eviten tener confusiones sobre juegos, precios y consolas.

De manera unánime catalogaron la intención de la legisladora Chávez, como una ocurrencia derivada del desconocimiento: “a partir del año 1994 se lanzó una sistema de clasificación por categorías para los videojuegos y películas, clasificándolas para niños, adolescentes y adultos, con el fin de evitar que los niños y jóvenes tengan acceso a contenido explícito y violento”.

Se refieren al Entertainment Software Rating Board (ESRB) que se utiliza en México, Estados Unidos y Canadá que clasifica los videojuegos según su contenido de violencia física o verbal y otros elementos como el contenido sexual. Esta clasificación orienta y ayuda a los padres y consumidores a elegir los videojuegos que son correctos para su familia.

De todos los “cuantiosos” tratados internacionales (de los que no menciona ningún nombre) la diputada Chávez no pudo dar con la clasificación de juegos con más de 25 años de existencia y numerosas adecuaciones para su mejor funcionamiento.

Los chavos agregaron que “el gran acceso a contenido explícito que tienen los niños y adolescentes es también una irresponsabilidad de los padres, ya que los videojuegos son las niñeras del siglo XXI”.

A la diputada Chávez, le recomendaron que explorara las diversas medidas que pueden tomar los padres en las consolas, como los mecanismos de control parental que permiten limitar el tiempo de juego, bloqueo de contenidos y del uso tarjetas de crédito.

Obvio, tras su iniciativa, la diputada no tenía idea cuando leyó su iniciativa y mucho menos se interesó en investigar en serio.

Otra iniciativa de tantas, hechas al vapor para subirse al tema que abordó inicialmente su compañero de partido, el gobernador de Coahuila Miguel Riquelme, quien puso a los videojuegos en el ojo del huracán, al culpar a los mismos de la tragedia del Instituto Cervantes de Torreón.

Quería atraer los reflectores.

Y lo logró.

Los chavos de Xpert Gamers pidieron ser incluidos en el debate en comisiones de la iniciativa, primero para ser escuchados y segundo, para ser un escudo ante la ignorancia demostrada en la propuesta legislativa contra los videojuegos.

Le recordaron a la diputada que hay muchos tipos de videojuegos, incluso los que ayudan mucho en diversos aspectos de su vida como el desarrollo de habilidades físicas.

Otra grave falta de la iniciativa es que menciona diversos estudios que demuestran que los videojuegos violentos trastornan la conducta de los usuarios, pero no menciona ningún nombre de estudios, ningún dato duro.

Parece un “yo tengo otros datos”, al que tanto recurre el prejidente López Obrador.

Es tan irresponsable lo que hace la diputada, como lo que hace AMLO: señalar, apuntar, juzgar sin ningún dato duro (y como hace Donald Trump).

Con que hubiera buscado en Google el nombre de Chris Ferguson de la Universidad Stetson de Florida, quien ha investigado por más de 15 años el mito que la diputada argumenta en su iniciativa: que los videojuegos convierten a la persona en violenta.

Tanto Ferguson como la American Psychological Association (APA) han llegado a una conclusión: no hay resultados concluyentes para sostener la afirmación de que los videojuegos causan conductas violentas.

Posterior a esta mesa de debate, la diputada Chávez no dio la cara e hizo el uso de su derecho de enviar una especie de réplica vía terceros a mi Whatsapp:

“Referente a la reforma a la Ley de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes del Estado de Chihuahua, donde se pretende adicionar una fracción al artículo 108, en ningún momento se abordó una prohibición expresa de videojuegos de contenido violento, como lo han venido manejando diversos medios informativos. Sino por el contrario se aborda la prevención en el tema al señala la obligación que se tiene como padre, tutor o cualquier persona que tengan bajo su cuidado niñas, niños o adolescentes, estableciendo con claridad, que como padres busquemos evitar el uso de estos videojuegos de contenido violento, atendiendo obviamente a la edad del niño, como ejemplo no debemos consentir que un niño de 4 a 9 años juegue un videojuego, que acorde a la clasificación que estos manejan, sea recomendado para alguien mayor de 17 años, pues sabemos que hay diversas etapas de madurez en los niños para el manejo de ciertos contenidos, y al tener sentido común, hay que reconocer que quienes compramos los videojuegos o juguetes a los niños somos los padres o si provienen de un regalo, siempre debemos estar involucrados en que hacen y que ven nuestros hijos, esto derivado de la crianza con valores que como padres debemos impartirles, aquí es donde entra el sentido de esta reforma, por ello sostengo que hay una interpretación inequívoca del sentido de la reforma en cuestión que toca un tema preventivo”.

Lo cual nos regresa al punto inicial abordado por la raza de XPert Gamers: La diputada Ana Elizabeth Chávez expuso su total desconocimiento del tema de los videojuegos y las normas que les permiten venderse en México, como el sistema de clasificación abordado líneas arriba.

Tal parece que la legisladora quiere legislar para decirles a los padres de familia como educar a sus hijos.

¿Eso no es limitar las libertades de las familias?

En la misma réplica califica su propuesta como “medida noble, ya que se busca que las autoridades coadyuven realizando campañas permanentes de concientización, dirigidas a las persona que tengan bajo su cuidado niñas, niños o adolescentes, con el fin de prevenir el uso de juguetes y video juegos que tengan contenido violento, aclarando nuevamente que estamos hablando de menores de edad y que se debe de entender dependiendo de la madurez emocional del menor. Se habló de una prevención, nunca de una prohibición y prevenir es atender, informar, aconsejar”.

Y volvemos a lo mismo: Desde 1994 existe un sistema de clasificación que se aplica a los videojuegos. El resto es responsabilidad de los padres y madres de familia.

La réplica finaliza: “adjunto la iniciativa (que es pública previo a la sesión) para su análisis y con ello evitar malas interpretaciones”. (Respeté lo más que pude la redacción original, pero le corregí las faltas de ortografía para no faltarle al respeto a usted que me lee; como “madurez” que estaba escrito como “madures” en el texto que envió el equipo de la legisladora).

No hubo “malas interpretaciones”. Siempre se trata de culpar al medio o al periodista por la ignorancia propia.

Cuando un trabajo es profesional se reconoce y con esta iniciativa, pues no fue el caso. No se puede legislar en serio, cuando se tienen errores tan básicos como la ortografía.

Y se sorprenden en el legislativo porque su imagen anda por los suelos.

ULTIMALETRA

Aquí un comentario sobre la iniciativa publicado en redes sociales: “El problema de la violencia es algo más profundo ,es la perdida de valores y moral , mejor que restringan las narconovelas y los padres pongan más atención en sus hijos también son responsables.”

luisruben@plandevuelo.mx

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