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CUENTO AL MINUTO

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CUENTO AL MINUTO 13: Café de chinos

Licha y Poncho entraron al café de chinos del barrio y ocuparon una mesa al fondo. Pidieron café con leche y pan. Luego de media hora, un anciano oriental se sentó en la mesa de junto con varios papeles y un ábaco de madera. La chica susurró a su pareja que debía sosegarse por la presencia del señor. El joven volteó a ver lo que hacía el asiático y preguntó con curiosidad qué era el objeto que usaba con agilidad y rapidez. El anciano murmuró en su idioma su desconocimiento del español. Poncho sacó una calculadora de su mochila y se la ofreció, diciéndole que la prestaría si iba a otra mesa donde no los viera. El viejo notó el ofrecimiento y muy serio expresó en su idioma que no lo necesitaba. El muchacho insistió subiendo el tono y un dependiente oriental se acerco diciendo en español que el señor no conocía el idioma y que era el contador del establecimiento. El joven aclaró que sólo le había ofrecido su calculadora, lo que causó una sonrisa en el dependiente, quien explicó que el contador era un experto en el manejo del ábaco y que se habría ofendido por ofrecerle un aparato electrónico. Poncho sacudió la cabeza, dijo a Licha «Vámonos», pidió la cuenta y en su mente rondaba la idea de que no le gustaban las cosas antiguas.

 

Fotografía de Willy Ronis llamada «Los amorosos de La Bastilla» (1957).

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