Luis Rubén Maldonado Alvídrez
En Chihuahua se prendió el cerro, como se dice popularmente y todo culpa del prejidente Andrés Manuel López Obrador, quien aprovechó que los chihuahuenses están preocupados por la crisis ocasionada por el coronavirus y permitió que se robaran el agua de la presa La Boquilla (ubicada en la región centro del estado) para llevársela a Tamaulipas. Esto sucedió el pasado miércoles cerca de las 7:12 de la tarde, en oscuridad física y política.
La bronca no es nueva, ni para el gobernador Corral ni para el prejidente, ya desde el año pasado, los agricultores habían denunciado las macabras intenciones de AMLO, incluso ya habían logrado detener el saqueo una vez al tomar por asalto la cortina de la presa y hasta hicieron que el Congreso del Estado hiciera una ridícula sesión en la cortina de la presa en mención.
El jueves pasado fue el día negro para el gobierno de AMLO y su representante plenipotenciario en Chihuahua, Juan Carlos Loera de la Rosa: Autos oficiales y privados quemados, más de 40 lesionados entre agricultores que protestaban y autoridades, que abyectas e irracionales, permitieron el robo del agua con la venia presidencial.
El súper delegado chihuahuense Loera de la Rosa tiene el gran talento de desaparecer y sólo aparece cuando hay problemas, sin embargo, no es eficiente en solucionar las broncas y menos en escuchar al pueblo. Defenderlo no le importa; sólo importa quedar bien con su amado tlatoani López Obrador.
Tan así que declaró a los medios que Chihuahua sería inhumano no vaciar la presa para entregarle el agua a Nuevo Léon y Tamaulipas. ¿Y los chihuahuenses?
Y así quiere ser gobernador.
Esta situación causó un choque político, pues Loera quiere ser gobernador, por el otro está el senador Cruz Pérez Cuéllar, que quiere a la misma novia.
Pues, el senador mandó un tremendo boletinazo para pedir la destitución de Blanca Jiménez Cisneros, titular de la Comisión Nacional del Agua por “haber traicionado al pueblo de Chihuahua y al presidente de México”.
¡Hágame el favor!
¿En serio es culpa de una funcionaria de segundo o tercer nivel? La comunicación senatorial deja claro que lo importante para Cruz no es el agua que nos robaron sino librar de toda culpa al prejidente.
Mal, mal, mal.
La bronca es vieja y pudo haber hecho algo antes.
Ahora, Loera y Cruz se enfrascan en una bronca política, puesto que Loera no sirve para nada, pero es intolerante a la crítica y Cruz, colmilludo como es, la ganó el tirón mediático y el súper delegado hace berrinche.
Lo que no entienden ambos es que: el robo del agua es culpa del prejidente y ellos son cómplices; como lo son todos los diputados locales y federales de Morena por Chihuahua, así como toda dependencia federal y hasta la senadora fantasma Bertha Caraveo.
No se quieran lavar las culpas que les corresponden porque se les olvida que los únicos que hemos perdido somos los chihuahuenses, por el agua que nos robaron.
ULTIMALETRA
Algunos datos del enfrentamiento entre agricultores, personal de Conagua, CFE y Guardia Nacional:
Conagua abrió el miércoles por la noche las compuertas de la presa La Boquilla, de donde salen 110 metros cúbicos de agua por segundo.
Ello desató protestas de los agricultores que señalan que las autoridades federales aprovecharon el momento, en plena contingencia por el Covid-19, para extraer agua de la presa. Bloquearon la carretera 45 en puntos como Meoqui, Delicias y Camargo en Chihuahua.
Quemaron cinco autos de Conagua y varias patrullas de la Guardia Nacional. Intercambiaron pedradas con la Guardia Nacional en La Boquilla.
Auto de la CFE atropelló y dejó a hombre herido en La Boquilla.
Quemaron la camioneta de la CFE.
Agricultores amenazaron con quemar casetas de cobro en las carreteras y luego rompieron vidrios de la caseta de peaje en Camargo.
luisruben@plandevuelo.mx
